domingo, 26 de mayo de 2013

Sin embargo, quizá ellos no me olvidasen aún.

Por un momento llegué a pensar que mis cimientos se desmoronaban. Me había olvidado de ellos; de los que se habían ya olvidado de mí. Comencé a hablar tan efusiva como cuando me pongo nerviosa y me olvidé de ellos.

Por fin me he dado cuenta de que ya no están en mi vida. Comienzas a crecer y tu vida cambia... todo lo que tienes cambia hasta el momento en que te llegas a plantear si una mera sangre puede hacer que esa sea tu familia. 

Quizá se olvidasen de mí cuando dejamos de hablar, quizá cuando nos hicimos mayores, quizá cuando comenzaron a contar con nosotros en sus planes... o cuando simplemente lo hacían para ahogar nuestra existencia. 

Quizá me he dado cuenta de la capacidad que tengo para amar a las personas que no se lo merecen... Porque, si una vez me dieras tu cariño no significa que después puedas quitarme todo lo que necesitaba o lo que quería para vivir. Quizá arruinaste la vida de unos 4 niños; quizá también la de 7; de los que necesitamos cariño y no nos damos cuenta hasta que nos vimos con la negación acá en nuestra vera. 

Sé que aunque pasen los años, te seguiré pensando. Sé que siento algo por ti. No puedo negar que alguna vez te amé, como se supone que uno quiere a su ... Aunque, puedo afirmar que puedo odiarte por arruinar la vida como a ti te la arruinaron. Si tengo que sentir algo por ti será lástima y odio pues yo no elegí esta vida.

Te odio tanto de quererte y no ser correspondido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario